Muchos de ellos no estaban satisfechos con Arón, pero como era el rey que los gobernaba, no tenían opción más que lidiar con él, por lo que reprimieron la furia en su presencia y levantaron los papeles. Abrieron los ojos, horrorizados, cuando se enteraron de la verdad. «¡Esto no puede ser! Esta no es la reina madre a la que le juramos lealtad. Ella nunca haría algo así».
—S-su majestad, debe haber un error —remarcó uno de ellos de forma cautelosa—. Su alteza nunca haría algo así.
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread