Claudia O’Brian despertará en un lugar desconocido convertida en la señora Mobasseri sin tener ni la menor idea de cómo fue que de ser una mujer soltera paso a estar casada de la noche a la mañana y lo peor es que ni siquiera tiene el más mínimo recuerdo de haber tenido una boda.
Richard Mobasseri tendrá la primera acción bondadosa después de que su corazón se congelara, sin embargo, nunca se imaginó, que el hielo que cubre su alma podría llegar a derretirse con solo una mirada.
No obstante, el pasado volverá para hacerles entender que tan fuerte es lo que sienten el uno por el otro.